En un valle rodeado de montañas vivía un joven llamado Darío. Era trabajador, curioso y lleno de sueños, pero había algo que lo hacía sentirse pequeño: su propia voz interior.
Para hacerle el amor a un hombre también debes de ser una romántica empedernida, una chef, una experta en modas, una enfermera y una niñera por si se enamora, porque son así.